Tarde de té y de Barbara Pym |
Después de mucho, muchísimo tiempo por fin he vuelto a leer a Barbara Pym. La semana pasada me acerqué a la estantería y de pronto sentí que era el momento perfecto. Fuera llovía, y yo tenía listo un buen cargamento de té, galletas y una mantita por estrenar. A falta de un vicario, me pareció un muy buen momento Pym.
Para este segundo encuentro con ella decidí probar suerte con Some Tame Gazelle, su primera novela, publicada en 1950. En realidad Barbara la había escrito durante la veintena, en los años que siguieron a su graduación en la universidad de Oxford, donde había estudiado Inglés. Profecía o no, Barbara se había inspirado en su propia hermana y en ella misma para crear a los dos personajes protagonistas de Some Tame Gazelle: dos hermanas solteronas, de cierta edad, que viven en un pequeño pueblo de la campiña inglesa. Dejadme que os presente a Belinda y a Harriet Bede.
Belinda, la hermana mayor, es una mujer tranquila y sencilla que disfruta del punto, la jardinería y de las conversaciones sobre poesía inglesa que mantiene con el arcediano de su parroquia, Henry Hoccleve, un amor frustrado de su juventud que terminó casándose con Agatha, una mujer ambiciosa y estirada. Por su parte Harriet, más alegre y parlanchina que su hermana, disfruta con cosas un poquito más excitantes y terrenales: como un vestido nuevo, una buena comida o la conquista de todo joven vicario que pase por la casa parroquial.
Para este segundo encuentro con ella decidí probar suerte con Some Tame Gazelle, su primera novela, publicada en 1950. En realidad Barbara la había escrito durante la veintena, en los años que siguieron a su graduación en la universidad de Oxford, donde había estudiado Inglés. Profecía o no, Barbara se había inspirado en su propia hermana y en ella misma para crear a los dos personajes protagonistas de Some Tame Gazelle: dos hermanas solteronas, de cierta edad, que viven en un pequeño pueblo de la campiña inglesa. Dejadme que os presente a Belinda y a Harriet Bede.
Belinda, la hermana mayor, es una mujer tranquila y sencilla que disfruta del punto, la jardinería y de las conversaciones sobre poesía inglesa que mantiene con el arcediano de su parroquia, Henry Hoccleve, un amor frustrado de su juventud que terminó casándose con Agatha, una mujer ambiciosa y estirada. Por su parte Harriet, más alegre y parlanchina que su hermana, disfruta con cosas un poquito más excitantes y terrenales: como un vestido nuevo, una buena comida o la conquista de todo joven vicario que pase por la casa parroquial.
Si; ambas llevan una vida tranquila en la que se suceden las actividades benéficas, las reuniones con los amigos y los pequeños placeres cotidianos. Pero todo cambia cuando la altiva Agatha sale de vacaciones y llegan al pueblo dos académicos y un extravagante obispo recién llegado de África. De pronto se suceden los compromisos y las proposiciones de matrimonio... ¿estarán dispuestas las dos hermanas a renunciar a su plácida existencia?
Creo que Barbara Pym es una de esas escritoras que me encantaría recomendar a todo el mundo, aún a sabiendas de que me lloverían reproches por todas partes. Como veis en la novela no faltan descripciones de un apacible pueblecito inglés, intrigas entre parroquianos e incluso historias de amor. Mentiría pues si dijera que no pasa nada. Pero el estilo Pym es especial. Al fin y al cabo ¿en qué tipo de historia dos hermanas solteronas de cincuenta años podrían convertirse en heroínas, y más contando como pretendientes con vicarios de la inglesa anglicana?
El mundo de Barbara Pym es pequeño y hermético: algunas solteronas, hombres de iglesia y algún que otro académico; un mundo de pequeñas alegrías y pequeños contratiempos. Pero si os sentís a gusto y adherís a él, pocas cosas podréis encontrar más reconfortantes.
Creo que Barbara Pym es una de esas escritoras que me encantaría recomendar a todo el mundo, aún a sabiendas de que me lloverían reproches por todas partes. Como veis en la novela no faltan descripciones de un apacible pueblecito inglés, intrigas entre parroquianos e incluso historias de amor. Mentiría pues si dijera que no pasa nada. Pero el estilo Pym es especial. Al fin y al cabo ¿en qué tipo de historia dos hermanas solteronas de cincuenta años podrían convertirse en heroínas, y más contando como pretendientes con vicarios de la inglesa anglicana?
Ya puedo ver a Belinda y a Harriet espiando por su ventana la salida de Agatha hacia Bélgica. |
En muchas ocasiones se ha comparado a Barabra Pym con Jane Austen y en cierto sentido, la comparación no es descabellada. Ambas comparten esa voluntad de observar minuciosamente la vida cotidiana, sin olvidar el uso de un humor agudo e inteligente.
En las novelas de Barbara muchas de las escenas cruciales ocurren durante las celebraciones benéficas de la parroquia; así ocurre en Some Tame Gazelle y también en Mujeres excelentes, la primera novela de Barbara Pym que leí; de pronto todos los personajes interactuan en torno a inofensivas tazas de té con pastelillos, creando o resolviendo rencillas. Todo muy educado, muy british, pero con estacadas mortales a fin de cuentas. Estos momentos y la importancia que se le da a la comida, son de las cosas que más disfruto de los libros de Barbara. En Some Tame Gazelle somos testigos de lo que comen sus personajes, de como lo cocinan y finalmente con quien terminan compartiéndolo. En pocas novelas he visto detallado un acto tan importante en nuestras vidas como es comer. Y es que, ¿a quién no nos ha proporcionado alegrías haber hecho de buena anfitriona o hemos pasado un mal trago cuando la receta no ha salido como esperábamos? Si no que se lo digan a la pobre Belinda y la oruga escondida en el gratin de coliflor.
El entorno, la comida y los personajes de Barbara son tan reales que estoy segura deben estar viviendo en algún pueblecito de Inglaterra en este mismo momento. Creo que ya estoy viendo a Belinda y a Harriet, sentadas en sus sillones, mientras ven Escape to the Country en BBC Two y leen la revista The Lady.
Me llevo muchas cosas de Some Tame Gazelle pero sobre todo el personaje de Belinda y sus reflexiones; esa manera que tiene de estar feliz y a gusto con su mundo. A pesar de haber perdido a su amor de juventud y tenerlo en la puerta de enfrente, Belinda es capaz de encontrar otras cosas que la satisfacen. En realidad "su pasión por el arcediano se había apaciguado y convertido en un sentimiento que se asemejaba más a la calma de una noche de invierno frente a la chimenea, que a la imprevisible embriaguez de una mañana de primavera."
Me llevo muchas cosas de Some Tame Gazelle pero sobre todo el personaje de Belinda y sus reflexiones; esa manera que tiene de estar feliz y a gusto con su mundo. A pesar de haber perdido a su amor de juventud y tenerlo en la puerta de enfrente, Belinda es capaz de encontrar otras cosas que la satisfacen. En realidad "su pasión por el arcediano se había apaciguado y convertido en un sentimiento que se asemejaba más a la calma de una noche de invierno frente a la chimenea, que a la imprevisible embriaguez de una mañana de primavera."
Al fin y al cabo la vida está hecha de trivialidades; de pequeñas rutinas y placeres que nos terminan arreglando hasta el día más gris. Como bien dice Belinda: "tenía la suerte de no necesitar gran cosa para ser feliz." No estaría mal aprender un poco de ella.
Retrato de una joven Barbara |
Si decidís darle una oportunidad, yo empezaría con Mujeres excelentes (aquí podéis leer que me pareció). En el caso de que os guste me hará muy feliz daros la bienvenida al mundo Pym. En el caso contrario…por favor, no matéis al mensajero :)
Un abrazo grande a todos y muy felices lecturas.
PD. Yo por mi parte ya he sacado Less than angels de la estantería.
PD1. ¡Dios mío! Estoy leyendo Gilead de Marilynne Robinson y creo que me estoy volviendo bipolar. La cosa va así: dos páginas seguidas se me hacen eternas, digo yo lo dejo y de pronto ¡pam! página brillante, que maravilla de libro. Veremos como acaba la cosa :)
10 comentarios:
A mí 'Excellent Women' me gustó mucho, precisamente por los pequeños detalles de la vida cotidiana que describe y que nos llenan de felicidad. Después me leí, 'Jane and Prudence' y también me encantó. Por supuesto que le voy a dar una oportunidad a 'Some Tame Gazelle'.
¡Un abrazo!
No he leído nada de Barbara Pym, pero después de leerte tengo unas ganas tremendas de estrenarme con algo suyo. No quiero llevar las expectativas muy altas, porque tengo comprobado que eso no suele ser bueno, pero con lo que comentas tengo la sensación de que es una escritora que me puede gustar mucho. He visto la otra reseña y también me llama la atención, así que veré qué libros hay editados en español y cuál escojo.
Como siempre, un placer pasar por aquí.
Un besote.
Ya desde el principio de tu entrada intuía que esta lectura era "mi tipo" y confirmado está. Y es que de esta autora ya he leído Mujeres excelentes, claro, y Jane and Prudence. Otro más, este, que entra en la lista, y con mucha fuerza además. Ya ves que soy miembro del Club Pym.
Besines,
Pues aún no me he estrenado con esta autora y voy a hacerte caso y buscar primero Mujeres excelentes.
Besotes!!!
Barbara es maravillosa!!! No he leído tanto de ella como me gustaría porque a veces no es tan fácil de encontrar :( pero lo que he leído me ha encantado sin ningún pero. Es justo como la describes, un lugar en el que refugiarse y que te va a levantar el ánimo seguro. Sus historias son siempre una buenísima opción! Ahora escribiendo me han dado unas ganas enormes de volver a leer 'Mujeres excelentes' :-D
Besines!
Querida Marie,
No he leido nada de esta autora, pero con esta entrada lo próximo que lea será un libro suyo. Ganas tengo de "meter las narices" en la vida de estos apacibles británicos, jejeje. Comenzaré, como hiciste tú, con Mujeres excelentes. Ya te contaré si me gusta o...
Un fuerte abrazo.
Ch.
¡Hola Marie! :)
Me suena la autora pero muy por encima porque hasta la fecha no había leído ninguna reseña de Pym. He ido corriendo a gooreads para apuntar Mujeres excelentes. Espero poder hacerme con él tan pronto como sea posible.
Además este libro tiene todos los ingredientes para gustarme. Hace poco leí "Hijas y esposas" de Elizabeth Gaskell y algunas de las cosas que comentas me recuerdan a él así que con más razón quiero leerlo.
Un beso y gracias por la reseña! ^^
No he leído nada de la señora Pym, pero si la comparas con Jane Austen sus historias no pueden ser aburridas. A veces parece que en una novela no pasa nada y, sin embargo, sus personajes pueden estar llenos de sorpresas. Me gustan los escritores que son capaces de dibujar los pequeños objetos o escenas cotidianas, como una comida. Tengo que leer algo de esta mujer.
Según iba leyendo tu detallada descripción me parecía estar en casa de la señorita Dorcas, (supongo que conocerás la historia de "Lark Rise to Candleford"), disfrutando de un buen pedazo de una de sus tartas, ya sabes, "one of her weakness", ("una de sus debilidades"), y una sabrosa taza de té. Como dice Belinda, no son necesarias grandes cosas para ser felices. Todo un mensaje filosófico.
En este caso, lo único que podemos hacer con el mensajero es darle las gracias por compartir pequeñas bellas historias.
Un abrazo, Marie.
Hola!!! la verdad es que no he leido nada de esta autora, pero por como hablas de ella, me ha entrado curiosidad, asi que te hare caso y empezare con Mujeres excelentes. Gracias por este descubrimiento
Por cierto, acabo de descubrir tu blog, y ya te sigo y te invito a visitar mi blog
Un abrazo
Me lo apunto ^^
No conocía ni el libro ni la autora (perdóname jaja). Pinta genial y tiene una portada preciosa.
¡Un besito!
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